La vida pierde todo sentido para Nicolas con la pérdida de su novia Daniela. Un día es invitado a formar parte de un ensayo clínico que le permitirá controlar sus sueños y accede con la esperanza de recuperarse. Ahora Nicolás puede soñar con Daniela cada noche y reanudar su relación, más idílica que nunca. Aunque sea en sueños. Y corriendo el riesgo de perderse en ellos para siempre.

«No es una película al uso, es la más brillante, y dolorosa también, representación de una película soñada (…) Vigalondo nos ha vuelto a regalar una obra única, inclasificable, una pieza de cine soñado y eterno.” El Mundo

«Cine sanador. Otra obra maestra ci-fi de Vigalondo (…) es una crítica al escapismo (artístico o lisérgico) y una reivindicación del sentido estoico de la vida con la aceptación de sus miserias.” Cinemanía

«‘Daniela Forever’ es un maravilloso acto de amor, egoísta, manipulador pero finalmente lleno de sinceridad y de sacrificio. Y de una imaginación febril, irónica incluso.” Fotograma